Ayer (14-09-2024) se celebró la International Observe the Moon Night (Noche Internacional de Observación de la Luna), evento en el que asociaciones científicas y educativas de todo el mundo sacan los telescopios a la calle para mostrar la Luna al público, fomentando así el conocimiento, valoración y disfrute de este astro entre la ciudadanía.
En Pamplona, este año el evento ha corrido a cargo de dos asociaciones: la Agrupación Navarra de Astronomía-Nafarroako Astronomia Elkartea y la red Astronavarra sarea, que lo celebraron de manera conjunta con una observación abierta al público con telescopios en la Vuelta del Castillo.
La observación duró aproximadamente tres horas, y en ella muchas personas se acercaron a los telescopios y quedaron fascinadas con la contemplación de la Luna, pudiendo observar los detalles de su superficie: mares, cráteres, cordilleras… contando también con las explicaciones de las personas colaboradoras y creándose un ambiente muy agradable en torno a este astro.
Pero, además de la Luna, la sesión tuvo también otros protagonistas:
Por ejemplo, en el inicio de la observación pudimos contemplar una bonita puesta de sol, que tuvo lugar en un cielo completamente limpio.
Un poco más tarde, pudimos ver, a simple vista, inmerso en la luz del atardecer, el planeta Venus, con un brillo bastante potente.
Y más tarde hizo presencia otro astro muy esperado: Saturno, que, con sus llamativos anillos, fascinó a todas las personas que lo miraron por el telescopio.
También pudimos contemplar algunas estrellas… y contamos también con una invitada especial: la Estación Espacial Internacional que pasó por el cielo con un brillo muy llamativo.
En definitiva: fue una sesión muy agradable, no sólo por la contemplación de la Luna y otros astros, sino también por el ambiente agradable, cordial y de diálogo creado entre las personas que allí estuvimos.
¡Un éxito más de la Noche Internacional de la Luna en Pamplona!





















Los cinco telescopios estuvieron funcionando a pleno rendimiento, no hubo descanso ni para ellos ni para nosotros (Patxi, Jesús, Iñigo, Eduardo, Mikel y el que escribe) a los que se nos pasó el tiempo volando. El público disfrutó con la vista y con las explicaciones, muy interesado sin importar su edad, y nos acribillaron a preguntas como no puede ser de otra manera. Los organizadores del evento proponían en su web la observación de algunos accidentes lunares característicos. Unos de ellos situados cerca del terminador (Montes Rümker, Aristarco, colinas Marius, cráter Shiller…) y otros en zonas con iluminación más vertical, posibilitando la visión de contrastes de brillo muy interesantes (cráteres Tycho y Messier con sus vistosos rayos, depósitos piroclásticos oscuros en el Mar de la Serenidad o en el Mar de los Humores…). Ciertamente eran perfectamente visibles durante la observación.
